La erosión del esmalte dental o desgaste por ácidos o químicos del esmalte es un trastorno cada vez más frecuente a causa de algunos productos que lo provocan.
Los que practican deporte tiene algunos hábitos que causan caries dental y erosiones. El consumo de refrescos, bebidas carbonatadas, líquidos isotónicos, alimentos y frutas ácidas, vino, etc. pueden provocar erosión del esmalte.
Al erosionarse el esmalte, se deja al descubierto a la dentina, provocando sensibilidad dental.
A pesar de que practicar deporte es saludable, tiene algunos inconvenientes:
- Bebidas isotónicas: tiene un elevado contenido en hidratos de carbono y también son muy ácidas, pudiendo provocar caries dental.
- Elevada ingesta de carbohidratos: si se tiene mala higiene dental, las bacterias que provocan la caries dental transforman los hidratos de carbono en ácidos que atacan al esmalte.
- Deshidratación: si estamos deshidratados, disminuye la cantidad de saliva. Esto provoca una pérdida de sus propiedades protectoras, provocando desgastes en el esmalte.
- Respiración bucal: al hacer deporte se aumenta la respiración, provocando que la boca se reseque. Por lo tanto, disminuye también la cantidad de saliva, perdiéndose sus propiedades protectoras.
- Funciones de la saliva: neutraliza el PH, remineraliza (contiene calcio, fosfato y flúor), regula la acumulación de bacterias cariógenas.
- Estrés: se da en los deportistas de élite por la exigencia que conlleva. Ante el estrés, se reduce la cantidad de saliva. También puede aparecer bruxismo.
La prevención, una buena higiene dental y la disminución del consumo de alimentos perjudiciales, así como la disminución del estrés, evitará la erosión dental.